“Desde
Kursk y Oriol en esta guerra hemos avanzado
Llegamos
hasta la misma puerta del enemigo
Así es
camaradas, lo hicimos
Algún día
recordaremos esto y no lo creeremos
Pero aún
necesitamos una victoria más
¡Una para
salvar al pueblo!
¡El
precio no nos detiene! ”
(Necesitamos
una victoria, canto militar del Ejército Rojo de la URSS [1]
[Haga play en la canción Necesitamos una victoria (Нам Нужна Одна Победа) y proceda a leer el artículo]
El pasado 09 de mayo se cumplieron los 70 años del triunfo del Ejército Rojo de la Unión Soviética sobre la Alemania Nazi. El 09 de mayo fue el día de la victoria, el día que posibilitó la paz en el mundo y el fin de la guerra. La hazaña de los soviéticos no tuvo y aún no tiene parangón en la historia militar de la humanidad: La movilización de todo un pueblo multinacional y multicultural en la defensa de la patria, cuyo costo humano fue la pérdida de 20 millones de soviéticos (en su mayoría civiles). La guerra que libraron los soviéticos contra la Alemania Nazi fue una guerra de defensa y de liberación de los pueblos y de la patria que históricamente han llamado La Gran Guerra Patria (1941-1945). En su momento, tal hecho fue reconocido en el mundo. Empero, los festejos por los 70 años de aquel triunfo se circunscribieron sólo a los países que conformaron la URSS, mientras que el resto del mundo quedó en silencio. Los llamados “aliados” no se hicieron presente en los festejos que se llevaron a cabo en la Plaza Roja de Moscú, ni se pronunciaron al respecto.
El pasado 09 de mayo se cumplieron los 70 años del triunfo del Ejército Rojo de la Unión Soviética sobre la Alemania Nazi. El 09 de mayo fue el día de la victoria, el día que posibilitó la paz en el mundo y el fin de la guerra. La hazaña de los soviéticos no tuvo y aún no tiene parangón en la historia militar de la humanidad: La movilización de todo un pueblo multinacional y multicultural en la defensa de la patria, cuyo costo humano fue la pérdida de 20 millones de soviéticos (en su mayoría civiles). La guerra que libraron los soviéticos contra la Alemania Nazi fue una guerra de defensa y de liberación de los pueblos y de la patria que históricamente han llamado La Gran Guerra Patria (1941-1945). En su momento, tal hecho fue reconocido en el mundo. Empero, los festejos por los 70 años de aquel triunfo se circunscribieron sólo a los países que conformaron la URSS, mientras que el resto del mundo quedó en silencio. Los llamados “aliados” no se hicieron presente en los festejos que se llevaron a cabo en la Plaza Roja de Moscú, ni se pronunciaron al respecto.
Traducción de la leyenda: Nuestra Bandera - La bandera de la victoria! Autor: Víctor Ivanov 1943 |
Después del fin de
la guerra, en el llamado mundo occidental la propaganda anticomunista
(macarthista) soslayó el papel fundamental que cumplió el Ejército Rojo en la
liberación de los pueblos. Y al parecer tal hecho sigue manteniéndose hasta
nuestros días. En la enseñanza de la historia se minimiza el papel del Ejército
Rojo de la URSS, por obvias razones ideológicas, así como se reproduce
insistentemente, a través de la literatura y sobre todo a través del cine, que
el papel de los aliados (Inglaterra, Francia y los EE.UU) fue determinante en la guerra, incluso desde hace
muchos años se exagera un llamado día “D” para opacar al frente oriental en el que combatieron los soviéticos, y lugar en
el que se decidió el fin de la guerra.
Un hecho que
también pasa desapercibido es la reproducción ideológica. La propaganda que
desplegaron los soviéticos a través de carteles que figuraban la defensa de la
patria así como los himnos que entonaban el Ejército Rojo fueron fundamentales,
no sólo para acerar la moral del hombre soviético sino también para divulgar al
mundo entero sobre el carácter de liberación que cumple el socialismo en bien
de la humanidad. Muchos de los carteles no sólo hacían hincapié en el valor de
los soldados sino también del valor de las mujeres soviéticas, quienes tuvieron
que hacerse cargo de la defensa y la economía del país. Los campos roturados
para el trabajo agrícola tuvieron que ser ocupadas por ellas, la industria
militar fue posible por el papel que ellas desempeñaron en su interior (ellas fabricaron las municiones y el armamento), así
como la movilización de miles de mujeres para realizar grandes zanjas, que
comprendían muchos kilómetros, para asegurar la defensa de las ciudades. La
movilización de las casi adolescentes voluntarias en el frente de batalla como
enfermeras, fue la prueba de fuego de aquellas muchachitas que tenían que
cargar con el cuerpo de los heridos que pesaban entre 80 y 90 kilos, mientras
que ellas oscilaban entre 45 y 55 kilos de su peso. Asimismo, las guerrillas
que brotaban en las fronteras de la patria estaban también compuestas por las
hijas del pueblo soviético, que codo a codo junto a los hombres no escatimaron
en ofrendar sus vidas en defensa de la patria socialista.
A continuación véase algunos de esos carteles:
A continuación véase algunos de esos carteles:
Traducción de la leyenda: Un tractor en el campo de cultivo es lo mismo que un tanque en el campo de batalla! |
Traducción de la leyenda: Integrate a las brigadas de enfermeras del Frente. Un soldado necesita tu ayuda! |
Traducción de la leyenda: Larga vida a las camaradas de armas! |
Traducción de la leyenda: Prometimos a nuestros heroicos maridos forjar sus armas y trabajar día y noche para romper un récord para ayudar a la línea del frente! |
Traducción de la leyenda: Todo por la victoria! A la primera línea mujeres soviéticas |
Por otro lado, el
ejército de la Alemania Nazi se preciaba de ser la mejor expresión de los
“superhombres” (emulando a la “bestia rubia” de Nietzsche). La supremacía de la
raza aria fue insuflada por esa
ideología racista. Orgullosamente los nazis se consideraban superiores
al resto del mundo, empero en el día de la victoria su ejército de arios fue vencido por su
antípoda, a saber, el Ejército Rojo de Obreros y Campesinos de la Unión Soviética, un
ejército popular, multinacional y multicultural, compuesto por todas las
nacionalidades que conformaron la URSS como los rusos, ucranianos, lituanos,
bielorrusos, moldavos, letones, estones, georgianos, armenios,
azerbaidzhanianos, kajazianos, uzbekos, kirguizianos, tadzhikianos,
turkmenianos y demás nacionalidades. Tal hecho, culturalmente es muy
significativo y frecuentemente pasa desapercibido, empero es importante recordarlo para echar
por tierra toda ideología racista, colonialista y pro-imperialista que
justifica la opresión y dominación de los pueblos en función de la supuesta
superioridad racial y cultural del occidente burgués y blanco.
Los nazis
pretendieron acabar con la Unión Soviética porque en su momento la URSS
representó la esperanza de los pueblos
del mundo y el gran sueño de la humanidad por un mundo mejor. Los nazis fueron
vencidos, y posteriormente la Unión Soviética desapareció. Según los liberales
estamos en un mundo libre. Orgullosamente tales sujetos reproducen
ideológicamente que “a este mundo nadie lo cambia, los sueños por un mundo
mejor al mundo capitalista son sólo rezagos de utopías trasnochadas, el único
cambio real y posible es la libertad del individuo, es decir, de uno mismo”.
Tal ideología liberal en el fondo comulga, a través de su silencio, con el
neocolonialismo que ejercen los países capitalistas sobre el resto del mundo.
Por eso recordar el Día de la victoria sobre el nazismo reafirma la exigencia moral y práctica de que aún “necesitamos una victoria”, tal como cantaba el Ejército Rojo de la URSS en plena guerra liberando a los pueblos del yugo imperialista de los nazis.
Por eso recordar el Día de la victoria sobre el nazismo reafirma la exigencia moral y práctica de que aún “necesitamos una victoria”, tal como cantaba el Ejército Rojo de la URSS en plena guerra liberando a los pueblos del yugo imperialista de los nazis.
Definitivamente,
necesitamos una victoria…
Lunes, 25 de mayo
del 2015.
_______________
[1] La letra completa del himno que recuerda el Día de la Victoria.
Necesitamos una victoria
(Himno de Guerra)
Aquí las aves ya no
cantan
Aquí los árboles ya
no crecen
Sólo nosotros,
hombro a hombro,
brotamos de esta
tierra.
Luces… y vueltas en
el planeta
y sobre nuestra
tierra, el humo.
Eso significa que
necesitamos una victoria más
¡Una para salvar al
pueblo!
¡El precio no nos
detiene!
¡Esperamos el fuego
de la muerte!
¡Y eso no nos da
miedo!
¡Las dudas se
disipan en la noche cuando avanza…
¡El décimo!
¡Nuestro décimo
Batallón!
En el campo de la
muerte sólo escuchamos
el grito de las
órdenes
Y el cartero se
vuelve loco buscando entre nosotros
Salen cohetes rojos
Golpes de metralla
que no descansan
Eso significa que necesitamos
una victoria más
¡Una para salvar al
pueblo!
¡El precio no nos
detiene!
¡Esperamos el fuego
de la muerte!
¡Y eso no nos da
miedo!
¡Las dudas se
disipan en la noche cuando avanza…
¡El décimo!
¡Nuestro décimo
Batallón!
Desde Kursk y Oriol
en esta guerra hemos avanzado
Llegamos hasta la
misma puerta del enemigo
Así es camaradas,
lo hicimos
Algún día
recordaremos esto y no lo creeremos
Pero aún
necesitamos una victoria más
¡Una para salvar al
pueblo!
¡El precio no nos
detiene!
¡Esperamos el fuego
de la muerte!
¡Y eso no nos da
miedo!
¡Las dudas se
disipan en la noche cuando avanza…
¡El décimo!
¡Nuestro décimo
Batallón!
P.S.
El himno Necesitamos una victoria se sigue interpretando en los tiempos de paz en Rusia así como en los demás países que conformaron la Unión Soviética. A continuación algunas interpretaciones contemporáneas.
En las calles de San Petersburgo, 2011.
En la voz de Elena Vaenga:
Y por los 65 años del Día de la Victoria: